La transformación digital: Un nuevo modelo de empresa adaptado a la revolución de las TIC – Ricardo José García Pinel
El desarrollo de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) ha modificado el mundo tal y como se conocía, afectando profundamente a muchos aspectos de la sociedad, tales como la economía, la cultura y la política, debido a que las TIC se encuentran presentes en la gran mayoría de las actividades del día a día, facilitando aquellas tareas tanto cotidianas como profesionales.
Este desarrollo, y destacando la actual conexión de millones de dispositivos entre sí, lo que bien se conoce como Internet, ha desembocado en la aparición de una capacidad de generación y distribución de la información que modifica notablemente la forma en la que las personas se comunican entre sí e interactúan con la información para adquirir conocimiento. Es habitual que hoy en día las personas usen las aplicaciones de móvil para comunicarse diariamente, las noticias se consulten a través de portales web en sustitución al papel, se encuentren miles de cursos on-line sobre temas avanzadas de manera que los alumnos puedan aumentar su conocimiento fuera de las aulas, las personas compren productos a través de una página web, y muchas más actividades, que en el pasado eran impensables, y que se pueden ver como un hecho del desarrollo social que se ha producido y que se caracteriza por la capacidad de sus miembros para obtener, compartir y procesar cualquier información en el momento deseado y desde cualquier lugar. Estado de desarrollo de la sociedad que se viene a denominar la Sociedad de la Información.
Este nuevo contexto en la sociedad obliga a las empresas a repensar totalmente su modelo de negocio, y replantear todos sus procesos, para poder enfrentarse así a este disruptivo cambio. Y esto es muy importante, ya que como si de la teoría de la evolución de Darwin se tratase, las empresas evolucionan, pero es en estos tiempos cuando solo aquellas capaces de adaptarse a un mundo digital serán capaces de sobrevivir.
Y la mejor manera de ajustarse a este mundo digital pasa por llevar a cabo una transformación digital de la empresa, es decir, una digitalización de la empresa, que no es ni más ni menos que realizar una orientación en los procesos, la cultura y la estrategia de la organización con el objetivo de crear canales de distribución y bienes/servicios basados en lo digital, además de conseguir acercarse a unos consumidores con unos hábitos, sin ninguna duda, más digitalizados.
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